Español: Ed Chappelle: Una Carta a Dios: A Letter to God
Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. (RVR1960)
Querido Dios,
Recuerdas cuando yo tenía cinco años y casi me atropella un automóvil, pero el automóvil se detuvo a tiempo, y todo lo que recibí fue una rozadura en el estómago? ¿Qué tal el día en que fui golpeado en la cabeza con una pelota de béisbol mientras jugaba béisbol en la liga menor? Tú estuviste allí y me ayudaste a sanar. En aquel día que mamá hizo un torta de cumpleaños, pero el perro de la familia se lo comió. Eso fue tan gracioso, pero mamá no pensaba así. Sin embargo, sentí que Tú pensaste igual. Tú compartiste muchas de mis divertidas aventuras y yo me imagino que te reíste conmigo.
Dios, en aquel día en que yo manejaba mi primer vehículo, y alguien me chocó por detrás cuando estaba preparándome para voltear a la izquierda. Recuerdo haber escuchado una voz que me decía que frenara. Eso evito que mi automóvil entrara en la otra vía de tráfico que venia en sentido contrario. Sí, Tú estuviste allí en ese momento conmigo, y la voz interior que escuché fue de Ti.
¿Qué tal esa vez que fui a nadar en el Mar del Sur de China a pesar de que yo no sabia nadar muy bien? Tú estuviste conmigo y calmaste mis miedos y me ayudaste a flotar. Siempre me has protegido. Tus palabras en el Salmo 91 se convirtieron en mi guía. Gracias por estar allí entonces y ahora.
Dios, mi mundo se vino abajo cuando mis padres fallecieron, mi padre en 1993 y mamá en 2001.
Sin embargo, Tú estuviste conmigo en mi tiempo de aflicción y tristeza para consolarme.
Tú también me diste consuelo durante mi servicio militar. Yo estaba nostálgico, pero tus palabras me fortalecieron en el medio de esas noches solitarias. En las dos circunstancias Tú restauraste mi mundo.
Dios, estuviste allí incluso cuando yo era demasiado joven para recordar. Yo necesitaba una transfusión de sangre
cuando nací porque mi sangre no estaba bien y no podía soportar la vida. Me diste esta primera transfusión de sangre y yo viví.
Pero lo que es más importante que esta transfusión de sangre física es el hecho de que me presentaste a Tu Hijo, Jesucristo. Gracias por la salvación que se encuentra solamente a través de Él. Gracias porque Tu Espíritu Santo hizo Su presencia real para mí.
Señor Jesús, diste Tu sangre en la cruz, y cuando se derramó en el suelo, me diste una transfusión de sangre espiritual porque la mía no era capaz de proporcionarme la vida eterna que se encuentra solo a través de Ti. Tú has estado conmigo en los tiempos buenos y también tristes, y te doy Gracias por haber hecho el sacrificio supremo por mí.
A través de las tormentosas noches de soledad de la vida, así como esos días de felicidad, Dios mío, Tu me has mostrado que tu amor es incondicional y que siempre estarás allí para mí.
Gracias Padre Dios, Señor Jesús y Espíritu Santo, por la misericordia y la gracia que has infundido en mí vida. Preciosa Trinidad, siempre has sido fiel y por eso puedo declarar con seguridad que soy un hombre bendecido.
Gracias, Dios, que estás en todas las circunstancias. Te alabo por ser la fuerza de mi vida. Amén.
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Translation by Pastor Victor Marcos/Troduccion del Pastor Victor Marcos